¿Por qué no podríamos estar equivocados como se equivocó Charles Taze Russell, quien en 1914 anunció el fin del mundo, o como Elena G. White, quien en su última predicción del fin del mundo fue para 1941? Ambos personajes estaban condenados a equivocarse, digo en mi conferencia, porqué las dos evidencias contundentes todavía no se habían cumplido en ese entonces.
Esas dos evidencia que muestro son: La declaración de independencia de Israel en su territorio, el 14 de mayo de 1948. Esta sería una evidencia únicamente para la Iglesia, que cuando viera el retoño de la higuera, sabría que había llegado su última generación.
Si analizamos los últimos 63 años, desde que Israel declaró su independencia, nos daremos cuenta que hemos pasado del burro y del caballo, y del alumbrarnos con candiles, a lo inimaginable del avance de la ciencia.
Nuestros bisabuelos, y aun nuestros abuelos, nunca imaginaron que nosotros íbamos a ser testigos de cosas asombrosas de la ciencia, tal como lo profetizó el ángel Gabriel a Daniel en el capítulo 12:4.
Los avances científicos y tecnológicos de las últimas décadas no tienen precedentes
en toda la historia de la humanidad.
En este impresionante pasaje también podemos ver, paralela a la profecía del desarrollo de la ciencia en los últimos días, la multiplicación de la humanidad. Hace 63 años éramos sólo 2,700 millones de habitantes; hoy somos casi 7 mil millones.
La capital mexicana, por ejemplo, hace 63 años era de un millón y medio; hoy es de 25 millones, considerada la segunda ciudad más grande del mundo, sólo superada por Tokio, Japón.
Estas dos evidencias del fin del mundo no tienen cuestionamiento, pues el avance de la ciencia es tan impresionante que hasta tenemos en estos momentos a seres humanos viviendo en el espacio, como son los astronautas de la estación Espacial Internacional Alfa, situada en órbita alrededor de la tierra.
GRANDES TERREMOTOS Y EPIDEMIAS
Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá terremotos en muchos lugares, y habrá hambres y alborotos; principios de dolores son estos. Marcos 13:8
El Señor Jesús dijo, como una evidencia de su venida, que habría un incremento en los terremotos; si hacemos una comparación de los últimos 63 años, nos daremos cuenta que de los 10 terremotos más grande de la Historia, seis están registrados desde el retorno de Israel a su territorio.
De esos seis, tres han sucedido en los últimos cinco años para ser exacto. El terremoto de Sumatra, a finales de diciembre del 2004, dejó 280,000 víctimas; este terremoto fue considerado de 9.3 grados en la escala de Richter. El de Chile, en febrero 2010, 8.8, y el más reciente en Japón, de 9.0 de magnitud (Información extraída de Wikipedia.org).
Otro dato muy importante que no hay que pasar por alto es el número de víctimas en estos terremotos. En todo el siglo XX, los muertos por terremotos fueron: 229,231.
Ahora miremos las víctimas en lo que va del siglo XXI; aclaro que en este informe todavía no han sido agregadas las victimas de Japón, pues todavía se sigue el conteo. De modo que sólo son las cifras hasta 2010: 812,681.
El incremento en sólo 10 años, del Siglo XXI al Siglo XX, fue de 583,450.
¿Verdad que le sorprenden estas cifras? Una razón más para pensar en las palabras del Señor Jesús, en relación al retorno de Israel y el fin de esta generación; no olvidemos que, según el Salmo 90:10, una generación es de 70 años.
LAS EPIDEMIAS
n lo que va de este siglo XXI, no sólo se han roto los récords de más terremotos, sino que es el siglo con más noticias de terror a las pestilencias, algunas heredadas del siglo XX, como el SIDA, que sigue contagiando a multitudes.
Pero las que han ocasionado pánico han sido las virales, como la gripe de las aves, a comienzo del siglo en Asía, y la más reciente aparecida en México en el 2009, conocida como “La Gripe Porcina”, o HNN1, y que en estos momentos está sucediendo un rebrote en Venezuela y en el mismo México.
Pero lo que más nos debe preocupar es el incidente de las plantas nucleares de Japón, plantas que quedaron dañadas a raíz del terremoto, y que hasta este momento no se ha podido terminar de cerrar la fuga de la radiación.
Sólo el próximo año nos podemos dar cuenta de la magnitud de este desastre; han dicho los científicos que por ahora es prematuro saber la verdad sobre este incidente. Pero sin lugar a dudas el continente que recibirá mayor cuota de este desastre será el asiático, donde podría haber brotes de cáncer y úlceras malignas en la piel sin precedente.
Cuando he escuchado estas declaraciones de los expertos sólo me ha hecho recordar el juicio de las siete copas del Apocalipsis, donde en una de esas siete copas se desata una epidemia de úlceras malignas, sobre el trono de satanás; no hay que olvidar que el continente asiático, a excepción de Corea del Sur, que es el único país cristiano en toda esta región, el resto adora al dragón, el dios de los budistas y hinduistas.
Permita Dios que a nuestro continente no nos llegue esa contaminación en gran escala, aunque es un hecho que nos “visitarán” partículas en menor medida, y muy seguro, llegarán peces contaminados a nuestras costas en un promedio de un año.
Como llegaría la radiación nuclear al continente americano.
Con todo esto sólo nos pone a pensar en las palabras del Señor, de que todo esto es únicamente el principio de dolores; lo que quiere decir que en estos últimos siete años, que inician el próximo 14 de mayo, miraremos cosas mucho peores.
NACIÓN CONTRA NACIÓN
En sus señales del fin del mundo, el Señor Jesús dice que vendrá un periodo previo a la entrada de La Gran Tribulación, al cual se le denomina como “el principio de dolores”.
Ese periodo es el de un periodo de violencia, que terminará con enfrentamiento de guerra; nación contra nación. Pero… ¿cuáles serían esas naciones? Si la profecía se aplica al lugar a donde el Señor Jesús regresará en su Segunda Venida, entonces estamos hablando de una crisis de guerras entre las naciones que componen esa área llamada Medio Oriente.
No olvidemos que este Medio Oriente está compuesto por 22 naciones árabes y musulmanes, que van desde Etiopia, Túnez, Libia y Egipto, hasta Pakistán; en toda esta región se tiene un profundo odio contra el Dios de la Biblia y contra el pueblo de Israel.
Si esto lo hubiéramos hablado el año pasado, tal vez no le hubiera dado importancia, pero en estos momentos sí le está dando toda la importancia, pues este 2011 comenzó con una crisis en el Medio Oriente, donde tenemos un enfrentamiento de las naciones de la OTAN, la coalición de naciones europeas y aun asiáticas y Medio Oriente, enfrentándose contra Libia, para tratar de sacar del poder al asesino Omar Gadafi.
Pero mientras Túnez y Egipto tienen una peligrosa calma, las cosas están que arden en Yemen y Siria. Mientras se empiezan a ver brotes en otros países árabes, Israel permanece sumamente en silencio ante todo lo que está pasando, pues es muy delicado todo lo que está ocurriendo en su área.
No olvidemos que Israel es el único país que adora al Dios de la Biblia, y por eso es odiado por sus vecinos, de modo que para Israel es muy delicado todo lo que acontece en su alrededor, pues cualquier error de Israel puede provocar que estas naciones se vengan en contra para evitar en ellas mismas el levantamiento.
La situación es sumamente delicada, ya que puede terminar en una confrontación que propicie el inicio de la guerra de Gog y Magog, donde el país Irán pudiera ser protagonista; esto parece estar a la puerta de la esquina.
La ola de violencia desatada en Medio Oriente, específicamente en Libia, ha provocado
la intervención bélica de países de la Unión Europea.
Recientemente grabé el estudio en Israel sobre esta guerra, y estoy hablando que esta guerra será provocada por el Nuevo Orden Mundial, para crear un conflicto de grandes proporciones y de esa manera obligar el pacto, de donde saldrá el falso mesías; osea, el anticristo.
Lo que sí ha quedado claro en este inicio del conflicto en el Medio Oriente, es que Estados Unidos ha perdido relevancia, y ésta ha pasado a los países de la Unión Europea; o sea, el antiguo Imperio Romano.
No olvide que la profecía del arcángel Gabriel, dada a Daniel en el capítulo 9, habla de un príncipe que saldrá de este imperio romano, hoy en día conocida como la Unión Europea, y que ese príncipe firmará un pacto por siete años. Y que a la mitad de la semana quebrantará ese pacto.
Como dije, recién acabo de grabar ese estudio sobre el pacto, y estará disponible en las próximas semanas.
Con lo que hemos leído no nos debe quedar duda de que estamos en la última generación.
La otra evidencia tiene que ver con el pueblo judío, y es el retorno de Jerusalén a manos de su pueblo, hecho que también ha sucedido en el periodo de esta generación, de la independencia del Estado de Israel.
Como dije, a partir del próximo 14 de mayo entraremos en los últimos siete años para el fin de esta generación. Y la gran pregunta que nos seguiremos haciendo es: ¿Se terminarán de cumplir las benditas palabras del Señor Jesús, si todas sus señales se han cumplido? ¿Por qué el Señor debe fallar en las últimas…?
De cierto os digo, que no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca. El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán. Lucas 21:32-33
CONCLUSIÓN
Apenas llevamos seis meses de este año 2011, y todavía no sabemos qué nos espera en los próximos meses; lo que sí es claro es que el terremoto de Japón desvió el eje de la tierra en 13 centímetros, y que los días se han acortado aún más de lo que había sucedido con los terremotos de Sumatra en el 2004 y el de Chile en el 2010.
Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo; más por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados. Mateo 24:22
De acuerdo a algunas conclusiones de los diferentes institutos de sismología, si continúa la tendencia de cómo se han venido desarrollando estos terremotos, y por el desbalance del eje de la Tierra, el próximo terremoto, y que debe ser igual de intenso o más grande, deberá suceder de un mes a un año, aproximadamente.
Y por las coordenadas, éste debería suceder en toda la falla de San Andrés, que se reparte desde la parte oeste de Canadá, hasta toda el área de California, y se puede extender a Centroamérica y el Perú.
Sólo el Señor sabe en dónde y cuándo sucederá, pero será parte del cumplimiento de sus señales antes de su gloriosa Segunda Venida.
Lo único que nos toca a nosotros no es estar poniendo fecha de un día determinado, sino exhortar a todas las personas a buscar con mucha más razón al Señor, y a estar vigilantes ante el cumplimiento de sus señales.
Los verdaderos cristianos debemos repudiar a los falsos apóstoles de la prosperidad, para que las plagas del Apocalipsis no los alcancen. Y debemos distanciarnos de burladores de la venida del Señor.
Como este Señor de origen argentino, que se autodenomina “el apóstol de los jóvenes”, quien se burla de la venida de Cristo. En su última burla lo hace aludiendo sarcásticamente del siervo del Señor, Yiye Ávila.
Este “apóstol” arrastra a miles de jóvenes, quienes, sin darse cuenta, participan en esta desgracia, al apoyar a burladores como éste.
Este burlador se mofa porque desde niño oye hablar de la venida del Señor y esto todavía no ha ocurrido; no sé cuantos años tendrá él, pero por lo visto tal vez tenga unos 45, e Israel sólo tiene 63 años de independencia. Todavía no se han cumplido 70 años.
Sabiendo primero esto, que en los postreros días vendrán burladores, andando según sus propias concupiscencias. Y diciendo: ¿Dónde está la promesa de su advenimiento? Porque desde el día en que los padres durmieron, todas las cosas permanecen así como desde el principio de la creación. II Pedro 3:3-4
Decir en estos días que el fin del mundo es un mito, es demostrar que es un perfecto ignorante, que está totalmente desinformado. Y si es un evangélico y todavía no sabe que el fin del mundo es una realidad, es porque ha sido adormecido por alguno de los falsos apóstoles de la prosperidad y por las doctrinas que vienen desde lo profundo del abismo, como es el G12, tal como lo hemos demostrado, que aunque hoy en día tiene múltiples ramificaciones con diferentes nombres, el origen sigue siendo el mismo.
Recomiendo a nuestros amigos lectores que tomen muy en serio todo lo que está pasando y busquen del Señor lo antes posible; antes que sea demasiado tarde. El Señor los espera con sus brazos abiertos.
Preciosa invitación la que te hace el Señor, mi querido amigo, y en estos momentos más vale estar en paz con el Señor; a los fieles del Señor le animo a que no bajen la guardia ante la eminente venida del Señor.
De: Dr. Antonio Bolainez
